- Área: 85 m²
- Año: 2011
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Fotografías:Gabriel Li, Shai Gil
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La casa en Limeklin Line se encuentra en un terreno agrícola de 25 acres en el Condado de Huron, Ontario. El terreno está en constante cambio debido a las cambiantes condiciones diurnas y anuales del clima, el cultivo y la ocupación. La casa se dispone ligeramente sobre la tierra, mientras que el registro y la amplificación de las condiciones específicas de este vasto paisaje productivo enmarca una amplia vista de los cultivos adyacentes a la casa, actuando como punto de referencia a un cambio topográfico existente en el sitio.
La casa está calibrada para permitir vistas desde y a través de la casa, lo que facilita su expansión espacial visual. Una amplia terraza al sur y al oeste ofrece espacios que se extienden en esta coreografía experimental, al mismo tiempo de mediar entre el interior y el exterior.
La casa se encuentra fuera de la red y utiliza una serie de medidas sostenibles que reducen su consumo energético. El emplazamiento y la orientación facilitan el calentamiento y el enfriamiento pasivos. Una cubierta generosa en voladizo se orienta hacia el sur, permitiendo que el sol del invierno entre para calentar el suelo de hormigón gracias a su masa térmica. Uniformemente distribuidas, las ventanas que se abren en el verano facilitan la ventilación cruzada, además de contar con un triple acristalamiento para reducir los puentes térmicos y el uso de sistemas de alta eficiencia, asegurando que los niveles de energía necesarios para el funcionamiento de la casa sea baja.
La casa ofrece de nuevo al paisaje cultural en el que se asienta. El lenguaje arquitectónico del exterior, un cobertizo monolítica de acero galvanizado, se informó a la lengua vernácula agrícola local para garantizar la coherencia visual en el paisaje y para facilitar la construcción con materiales locales y de origen. La construcción fue terminada en gran parte por agricultores locales familiarizados con las prácticas de construcción agrícolas. El rico diálogo con artesanos de la zona aseguró que la casa tenga sus raíces en las prácticas de construcción y convenciones de acuerdo al contexto que ofrece el roce con la comunidad y los recursos energéticos innovadores.
El interior de 85 m2 se compone de un núcleo de espacios de servicio flotando dentro de la cáscara. Las vistas fueron cuidadosamente calibradas a través de este núcleo garantizando que, a pesar de su limitada presencia, la casa es visualmente expansiva. Creando un diálogo de respeto frente a la cultura local y el paisaje, se fomenta un sentido de responsabilidad hacia los procesos ecológicos y ambientales del vasto paisaje agrícola en el que se encuentra la casa.
